50 cm. Planta anual de la familia Asteraceae; se distribuye por el área mediterránea y Europa meridional; frecuente en la Península Ibérica.
Brota en otoño, de las semillas dispersadas por el viento en otoño, es una planta con tallo cilíndrico y ramificado desde la base y luego con una ramificación en la parte superior, todo el tallo es alado y acompañado de pequeñas espinas amarillas; las hojas son alternas y decurrentes, muy alargadas con una fila de pequeñas espinas en el borde y pares de espinas grandes de hasta 15 mm a intervalos en el borde foliar, el haz es de color menta y el envés tomentoso blanquecino, hojas grandes de hasta 12 cm.
La flor es un capítulo terminal solitario o agrupaciones terminales de 2-8 flores en corimbos, estos capítulos son sobrepasados por las hojas superiores, tienen un involucro imbricado de brácteas coriáceas acabadas en espinas y curvadas hacia fuera, especialmente las externas, de aquí nacen pequeñas flores hermafroditas de color rosado muy protegidas, son pentámeras tubulares con base blanca y limbo rosado púrpura, 5 estambres con anteras rosadas y estilo blanco.
El fruto es un aquenio pardo castaño oblongo con vilano plumoso de 2 cm.
Florecen desde principios de verano a principios de otoño.
Crecen en suelos incultos de todo tipo, linderos, bordes de caminos, eriales hasta los 2.000 msnm.
En otoño se secan, sirviendo de refugio y protección a algunos tipos de insectos, como la Apteromantis áptera.
Sus semillas son muy apreciadas por los fringílidos.
Es un ejemplo de planta rústica, dura y adaptativa, con buenas defensas espinosas, que florece en los meses de más color, en pleno verano mediterráneo. Fotos de la Serranía de Ronda, donde es frecuente.