Infección de las plantas producida por este hongo de la familia Pucciniaceae; se distribuye por Europa y área central de Norteamérica; frecuente en la Península Ibérica.
Es un hongo que precisa de dos huéspedes alternativos, el primero es una planta del género Juniperus (Enebro) o en menor medida Cupressus (Cipreses), sobre este hospedador se produce unas formaciones alargadas llamadas Teliosporas o cuernos teliales, son de 10-20 mm de aspecto gelatinoso y color anaranjada al principio y marrones después, pueden estar agrupados o dispersos por la planta; estas formaciones liberan esporas que son transportadas por el aire hasta llegar a un huésped secundario, en este caso debe ser una planta de la familia Rosaceae, con frecuencia un majuelo ( Crataegus monogyna), sobre este se asienta en las hojas, produciendo manchas de color rojizo con puntos negros, pero también sobre pedicelos, ramillas terminales y frutos, engrosando el lugar de asentamiento y dando lugar a formaciones con pequeños tentáculos pálidos de 2-4 mm llamados ecidios, a su vez estos ecidios contienen las ecidiosporas, las mismas que serán transportadas por el viento hasta el nuevo hospedador primario (Enebro o Ciprés).
Este ciclo requiere dos años para completarse, el primero se desarrolla sobre el Enebro o similar y al segundo año se desarrolla sobre las Rosaceas (Crataegus o similar); cerrando el ciclo cuando al tercer año se infecta de nuevo el Enebro.
Puede producir daños sobre las plantas hospedadoras como son defoliación, pérdida de frutos y malformaciones, en general bien tolerada por los árboles.
La identificación es probable, pero no cierta, ya que habría que realizar un examen microscópico del interior de las agalla para estar seguros de la especie.
Fotos de la Serranía de Ronda.