32 cm de longitud. Córvido pequeño; se distribuye por todo el Paleártico occidental; en la Península Ibérica está presente en la mayor parte, con la excepción de algunas zonas costeras y zonas forestales densas.
Su plumaje de base es gris oscuro, ceniza, con un tono más claro en la nuca, alrededor del pico y píleo negro, así como las alas; pico y patas gris oscuro; iris blanco azulado.
Este simpático y familiar pájaro habita en paredes rocosas, edificios antiguos, cascos históricos, zonas con viejos árboles con oquedades, gargantas fluviales, etc. En Extremadura tenemos ciudades históricas con grandes poblaciones de esta especie, como es Trujillo, Cáceres, Salamanca, etc., donde aprovechan los mechinales y huecos de los grandes edificios.
Su alimentación es omnívora, su base principal son las semillas de los distintos cultivos de la península, brotes tiernos, invertebrados, basureros, etc., en primavera también huevos y pequeños pollos, así como pequeños reptiles y micromamíferos.
Habitan en colonias más o menos numerosas, donde se establecen los lugares de crías, crían en huecos (trogloditas) de paredes, edificios, grietas, huecos de árboles etc., el nido se construye en abril a base de pequeñas ramillas, pelo, lana y algo de barro,, posteriormente la hembra depositará de 3-6 huevos de color blanco con pintas oscuras, serán empollados por la hembra en solitario, y a los 18 días nacerán los pollos, estos son alimentados por ambos progenitores abandonando el nido a los 30 días, luego permanecerán unas semanas más acompañando a sus padres.
La presencia de esta ave se condiciona por la posibilidad de establecer sus colonias, es decir, precisa de lugares de refugio estables; de otra parte se alimenta en lugares abiertos, con frecuencia acompaña al ganado y a otras aves en los pastizales y campos abiertos, formando grandes bandos; por desgracia, cada vez se ven más alimentándose en los vertederos, con el consiguiente riesgo para su salud.
En la Península se cree que habitan unas 5000.000 parejas con tendencia positiva.
En primavera son, como otros córvidos, expoliadoras de nidos, lo que no les acarrea buena fama.
Fuente: SEO/Birdlife y otras.
Fotos del Centro de Interpretación del Paraje Natural de Fuentepiedras, Málaga.