43-55 cm de longitud y 115-140 cm de envergadura. El Aguilucho lagunero se distribuye por gran parte del mundo en zonas templadas y tropicales, la subespecie que tenemos aquí es la “aeruginosus” y se distribuye por toda Europa en primavera y verano ocupando las zonas húmedas, luego en otoño migra hacia sus cuarteles de invierno en África, pero una parte de la población se queda en el sur de Europa a hibernar, especialmente en la Península Ibérica, donde es fácil de ver en los humedales y cuenca de los ríos tanto criando en primavera, como en invierno, a esto se suma la migración que atraviesa la Península Ibérica dos veces al año.
Es el Aguilucho mas grande que tenemos en la Península y mas pesado, aún así su silueta es estilizada con grandes diferencias de plumaje entre el macho y la hembra, su cola es larga y redondeada.
El macho con el extremo del ala negro, borde alar delantero manchado de blanco y resto del ala gris, cola gris, espalda y supracoberteras castaño, el vientre es castaño y las infracoberteras caudales tienen un tono castaño, patas amarillas y la cabeza y pecho es blanco amarillento.
La hembra es en general más oscura con tonos pardo y castaños, lo que más destaca en ella es que tiene la cabeza blanco amarillento y la garganta también, lo que contrasta mucho con el resto del plumaje, suele tener el borde alar blanco y manchadas por encima de blanco las coberteras e incluso la espalda.
Se elevan con las alas en V de forma suave, sobrevuelan los terrenos donde se han instalado para capturar micromamíferos, pequeñas aves, anfibios, peces, reptiles e insectos, también come carroña cuando no tiene otro alimento disponible, sus territorios de caza van más allá de las zonas húmedas, para ello patrulla laderas, campos de cereal y linderos en busca de presas.
La pareja realiza vuelos de exhibición nupcial sobre el territorio elegido, luego construyen un nido sobre el agua somera o en la orilla, entre la vegetación palustre ( carrizos, eneas, juncos, etc.) que construye con estos mismos materiales vegetales, posteriormente la puesta es numerosa de 3-8 huevos que suele incubar la hembra, el macho aporta la comida, tras 31-38 días de incubación nacen los pollos y tras 35-40 días estarán listos para volar.
En invierno suelen dormir juntos, eligiendo para ellos dormideros entre la vegetación palustre o árboles próximos al agua.
Esta especie tuvo un fuerte declive a mediados del siglo pasado, actualmente se está recuperando poco apoco y cada vez es más fácil de observar, tanto en migración como establecida en nuestros humedales.
Foto destacada de hembra en Doñana. Invierno 2015.
Descansando en la Serranía de Ronda. Otoño 2015.
Siguiendo su viaje a África. Hembra.