8-51mm. Escarabajo endémico de la Península Ibérica y Norte de África, se piensa que procede del norte de África, actualmente en expansión hacia el sur de Francia.
Escarabajo muy llamativo de color negro en general, antenas cortas con 11 artejos esferoidales, cabeza y tórax pequeño, élitros muy pequeños que apenas cubren el primer tercio del abdomen, abdomen muy grande y alargado con una franja dorsal naranja-roja al final de cada segmento abdominal, en algunos casos esta franja puede faltar, siendo totalmente negro el individuo. No vuelan.
Habita zonas soleadas en prados, cultivos de cereal, baldíos y bordes de caminos, a veces zonas montañosas con escasa vegetación y pedregales.
Esta especie realiza lo que se conoce como hipermetamorfosis, ya que pasa por distintas fases larvarias de aspecto muy distinto.
Las hembras ponen unos cientos de huevos semienterrados a final de primavera, luego de eclosionar tiene un aspecto parecido a «pececillos de plata» con tres uñas al final de cada pata (triungulinus), que se suben a la corola de las flores y esperan la llegada de abejas solitarias, a las que se agarran( a veces se agarran a otros insectos fracasando) y son transportadas a sus nidos, una vez allí parasitan una larva de abeja solitaria, ocupando su celdilla, alimentándose de néctar y polen, luego crea una pseudopupa y se convierte en una larva de distinto aspecto y mayor, en este caso se alimenta del polen y miel almacenado en el nido de la abeja solitaria, finalmente formará otra pupa de la que emergerá en primavera un adulto o imago.
Este escarabajo segrega cuando está asustado una gota aceitosa ( de ahí su nombre de aceitera) de líquido rico en cantaridina, muy irritante y tóxico, lo que hace desistir a sus depredadores, a parte de color aposemático.
Foto de la Serranía de Ronda, donde es muy abundante en primavera y verano.
Pareja abril 2016.
Noviembre 2017.
Noviembre 2017.
Abril 2019.