50 cm. Planta herbácea de la familia Papaveraceae; se distribuye por la ecozona paleártica, es decir Eurasia, Oriente Medio y norte de África; frecuente en los campos abiertos y soleados de la Península Ibérica.
La planta se inicia con la aparición de una roseta basal de hojas pinnadas, de ahí brotará un largo tallo floral poco ramificado que le proporciona la mayor parte de la altitud, este tallo es verde o con tonos morados y tiene pelos largos y finos blanquecinos.
Las hojas son de forma variable, alternas, en general doblemente divididas y con lóbulos partidos hasta el raquis de la hoja (pinnatisectas), color verde.
Las flores surgen de un capullo formado por dos sépalos recubiertos de abundante vello blanco, tiene cuatro grandes pétalos de color rojo escarlata con una mancha negra en la base (a veces mancha negra con bordes blancos), los pétalos son finos y delicados, se marchitan muy pronto, la flor mide unos 5-6 cm de diámetro, en el centro hay un disco central o gineceo, éste tiene de 8-18 radios en su superficie, está rodeado por numerosos estambres de color negro.
El fruto es una cápsula ovalada (forma de copa) con numerosas pequeñas semillas dentro de forma ariñonada, reticuladas y pardas, se dispersan por la parte superior de la cápsula, movida por el viento.
Florecen en primavera y hasta inicios del verano, dependiendo de la altitud.
No toleran el encharcamiento y requieren suelo drenado y soleado, se adapta a todo tipo de suelos.
Es frecuente en campos de cereal, viñedos y olivares, en general cultivos de secano, con los que comparte ciclo de vida.
Poco que decir sobre la belleza de los campos de amapolas, esos campos rojo intenso que domina el terreno en abril y mayo, pocos nos resistimos a pararnos y hacer unas fotos.
Dentro de otros usos, hay que destacar que sus hojas son comestibles, en ensaladas y cocidas, pero hay que tomarlas con moderación, ya que tienen una sustancia la rhoeadina que provoca somnolencia y molestias gástricas; las semillas son inofensivas y se usan en bollería y panadería, los pétalos también se pueden usar en mermeladas.
Las fotos son de la Serranía de Ronda, muy habitual en los campos de cereal.