Hasta 8 cm de largo y peso de 8-15 gr. Caracol grande de la familia Helicidae; se distribuye por la mayor parte de Europa, Oriente Medio y norte de África, desde ahí se ha introducido en áreas cálidas y húmedas de buena parte del mundo; hay 4 subespecies, la subespecie aspersa es la que corresponde a la Península Ibérica.
Es un caracol de color variable, va del marrón oscuro, poco habitual, a tonos marrón con franjas de tonos dorados o amarillentos, su superficie es rugosa y tiene de 4-5 espirales en el caparazón; tiene un caparazón calcáreo en espiral, su cuerpo es blando y se refugia dentro del caparazón, la apertura es grande con borde de color claro y engrosado en los ejemplares adultos.
Se alimentan de hierba de distintos tipos, arbustos, árboles y corteza, excepcionalmente de materia vegetal en descomposición.
Habitan en lugares con cubierta vegetal y cierto grado de humedad.
Los meses de mayor frío hibernan, escondidos en agujeros o bajo piedras; en las regiones de veranos calurosos estían, es un proceso similar a la hibernación, en este caso segregan un moco espeso que se solidifica (Epifragma) y cierra la apertura, permaneciendo los meses de mayor calor refugiado y protegido de los depredadores, se suelen fijar, para estiar, en ramas, troncos, piedras, etc.
Son nocturnos o crepusculares, aunque en días lluviosos pueden estar activos.
Son hermafroditas, tiene ambos sexos, pueden autofecundarse, aunque o habitual es que se apareen con otros, en este caso se insertan los penes de forma recíproca y se fecundan, esto ocurre a final de la primavera o principio del verano, tardan de 4-12 horas en aparearse, unos 5 días después harán la puesta, para ello excavan un pequeño agujero en el suelo y depositan de 80-90 huevos, unas dos semanas después emergerán los pequeños caracoles, tardan de 1-2 años en llegar a adultos y poder reproducirse.
Pueden llegar ser una plaga y es considerada una especie invasora en muchos países, pudiendo ocasionar daños importantes a los cultivos.
Tiene un uso culinario o gastronómico en nuestra área (sobretodo Francia y España), usándose para guisos y en salsa, de hecho se cría en granjas actualmente, a parte, las tradicionales recogidas de caracoles silvestres; también tiene un uso cosmético, ya que se ha comprobado que la baba de esta especie de caracol es muy buen regenerador de la piel.
Como sabemos, son muy lentos, esta especie camina a 50 cm por hora, siendo una especie bastante rápida; al caminar dejan un rastro de baba, baba que utilizan para desplazarse sobre ella y reducir el rozamiento del suelo.
En mi caso particular, los he comido varias veces, y tienen un sabor peculiar, sabor a caracoles en salsa de almendras.
La recolección de realiza principalmente en primavera y otoño, y hay que evitar cogerlos en época de reproducción, salvo que sean una plaga en un área determinada.
Diezman sus poblaciones el uso de herbicidas e insecticidas y la agricultura intensiva; también tiene enemigos naturales como son algunas aves, erizos, insectos y catástrofes naturales, como el fuego o las inundaciones.
Fotos de la Serranía de Ronda.