24-25 cm de longitud. Se distribuye por todo el Paleártico, adentrándose hasta Asia Oriental, también en Baleares y Canarias; la subespecie que habita la Península Ibérica es «merula»; muy común en bosques, dehesas, y jardines.
El mirlo común o black bird (en inglés) es una de las aves más comunes y cercanas a nosotros, ya que vive en nuestros jardines; el macho es negro con pico y anillo ocular naranja y cola larga, la hembra es gris oscuro con pico color hueso o amarillo pálodo; los jóvenes son parecidos a as hembras pero con plumaje algo más claro y jaspeado.
Se alimentan de insectos y lombrices, también de fruta y bayas cuando están disponibles. Andan dando saltitos y con el cuerpo erguido, siempre buscando las sombras, a veces se quedan mirando al suelo con la cabeza ladeada como si escucharan para acto seguido dar un picotazo y sacar una lombriz.
Ave sedentaria con movimientos migratorios en las zonas más frías que alcanzan a la Península Ibérica.
Vive en zonas arboladas como bosques, dehesas, riberas, zonas arbustivas y jardines, tiene un canto melodioso y aflautado con estrofas que cambian de tono y terminan ascendiendo; el nido lo construyen en arbustos o zonas bajas de los árboles, con hierba y hojas, el interior con material más fino y barro, deposita 3-6 huevos que empollará, principalmente la hembra, durante 13 días, luego los pollos permanecerán escondidos en zonas cercanas y serán alimentados 2 semanas más hasta emanciparse.
Es de las aves que comienzan a cantar antes, desde enero, aquí en el sur, empiezan los machos con el celo, y a finales de febrero ya se ven algunos nidos.
Baño de mirlo joven, verano 2015.
Otro joven mirándome y yo a él.
Madre a la izq. y joven a la derecha,julio 2016.
Sobre nogal, macho, febrero 2014.
Mirlo sobre mi balaustrada 2015.
Macho bañándose, octubre 2017.
Hembra bañándose en compañía, octubre 2017.