40 mm. Caracol de la familia Helicidae; se distribuye por el sur peninsular, Baleares y Marruecos, también introducido en algunos países americanos.
Caracol de color variable, de tonos claros a oscuros, suelen aparecer 4-5 bandas de color marrón, sin tonos azulados, el periostoma o boca es de forma oblicua y ensanchada, de color oscuro o negro, borde poco desarrollado, zona externa deprimida y convexa; concha sólida y gruesa.
Habita en zonas de cultivos de secano, también eriales, requiere que haya majanos (montones de piedras en medio de zonas de cultivo), paredes de piedra o troncos, donde refugiarse en invierno y verano.
Activos en primavera y otoño, en invierno suelen hibernar y en verano estiar, para ello buscan un lugar seguro y crean una capa, en la abertura, de moco que se solidifica y endurece llamada epifragma (membrana dura y blanca).
Son hermafroditas y se fecundan de forma simultánea, se aparean en otoño y ponen unos 50 huevos, los huevos se depositan en un pequeño hoyo excavado en la tierra húmeda del otoño y tapados con tierra y moco, los huevos eclosionan en unas dos semanas; los pequeños caracoles se comen la envoltura o cáscara que los recubre y de ahí pasarán a su vida exterior.
Son herbívoros y algo carnívoros, en unos 6 meses llegarán a adultos; no realizan mudas y su concha va creciendo según sus necesidades.
Parece que son sordos y ciegos, con un tacto muy desarrollado.
Viven unos 5 años en libertad.
Los caracoles son básicos en la alimentación de distintas aves, reptiles, erizos, etc., por lo cual la mengua de sus poblaciones afecta mucho a los ecosistemas.
También tienen un valor culinario en ciertas partes de la Península Ibérica, se recolectan y se cocinan en forma de guiso, con distintas recetas que en algunas localidades son famosas, especialmente como tapas en los bares.
Personalmente los he recolectado cuando chico, junto a mi padre, en las frescas mañanas de la primavera serrana, también los he comido en algunas ocasiones, cocinados con salsa de almendras, personalmente no me parecen muy exquisitos, aunque para gustos colores.
En el sureste peninsular (Almería y Murcia) tenemos la subespecie Otala lactea murcica, que tiene el labio o periostoma más desarrollado y un tubérculo en este borde que forma un pequeño ángulo recto.
La diferencia entre Otala lactea y Otala punctata se basa en el color del periostoma, oscuro o negro en Otala lactea y claro o blanco en Otala punctata.
Identificación de Alejandro Pérez de BV, y otras claves aportadas para diferenciar especies y subespecies de este género, por lo cual le doy las Gracias.
Fotos de la Serranía de Ronda.